31 diciembre 2010

La grieta

El caso es que me apetece escribir algo para que esos dos últimos post vayan bajando y se vayan enterrando en el olvido, que es donde deben estar. Que lo que no puede ser es que el otro día un colega se me conecte al messenger para preguntarme si voy a suicidarme ya o todavía no.

La cuestión es que estoy de bastante buen humor estos días, haciendo mucha vida social, no toda ni necesariamente en el lado de fuera de las puertas de mi casa, estoy haciendo cosas como agregar en el facebook a gente que no conozco de nada y bromeando y partiéndome de risa. Pero luego llego aquí y me da por recogerme sobre mí misma y me apetece, no sé, por ejemplo poner una canción como esta:

Toca las campanas que aún pueden sonar, olvida tu ofrecimiento perfecto. Hay una grieta en todo: así es como entra la luz.

26 diciembre 2010

Emptyness

Palabras, palabras y palabras. Para no decir absolutamente nada. Miradas que no llegan a ningún alma. Ojos que no leen lo que está escrito. Mensajes falsos que no contienen nada.

Hoy he estado en un bar donde han sonado versiones de canciones en lugar de las canciones originales. Me han dolido especialmente las de Feo, fuerte y formal y Cadillac solitario. Últimamente echo de menos a Loquillo, tal vez porque representa un intento de fidelidad a uno mismo, anclado a mi idea de adolescencia, de pureza, de cosas intactas y de inocencia.



Cuando tenía 17 años, esta canción me hacía sentir vieja. O me hacía pensar en cómo me sentiría cuando fuera vieja. Cómo me sentiría cuando tuviera la edad que tengo ahora, tal vez. Ahora la escucho y no me siento así, pero recuero cómo me sentía entonces. Y cómo pensaba que me sentiría. Y cómo me equivocaba.

Y recuerdo esa frase de Bruce la primera vez que la escuché: That maybe we ain't that young anymore.

Ya no somos tan jóvenes. Y, como decía en Closer Larry, el personaje que os presenté el otro día interpretado por Clive Owen (otra vez viviendo a través de la pantalla, y las que vendrán): "todo es una versión de otra cosa".

El caso es que iban cayendo Jack Daniels con hielo y yo cada vez me sentía más en sintonía con el mundo, y al mismo tiempo, paradójicamente, más lejos y más consciente del vacío de todo. Las versiones se sucedían y todo parecía vacío.

Todo estaba vacío.

24 diciembre 2010

Human touch

Ando por el mundo buscando un contacto. No es verdad, no busco. Solo espero. O tal vez no espero y solo sueño. Esta noche, por ejemplo, soñé que un hombre me deseaba (a falta de esa sensación en la vigilia). En realidad no era un hombre, sino un niño. Alguien muy joven. Y yo me iba y después me desperté sin que pasara nada, sin que existiera ese contacto. Algún analista tendría algo que decir sobre esto. Me descubro comprendiendo que ciertas experiencias simplemente no son para mí, ya no o tal vez nunca lo fueron. Me reconozco viviendo en la ficción de la pantalla con una dolorosa intensidad que no experimento en la calle, en el bar, en casa. Un deseo triste de que la fotografía de mi vida tenga ese color mágico que nunca parece tener. Y no sé si lo que quiero es vivir otras vidas, ser otras personas, respirar otros aires a través de otras narices. Hoy mi amiga me hablaba del libro que está traduciendo, que habla sobre las distancias entre tres "yo": el real, el soñado, el sentido. La tesis del libro, escrito por cierto por un economista, es que cuanto mayor es esa distancia, menor es la felicidad. No he querido, mientras hablaba, pensar qué distancia separa mis yos, porque no, porque no. Mientras escribo veo la foto que puse el otro día en el blog, la de Jack Huston y su personaje con la máscara de lata que tapa su horrible deformidad, su medio rostro destrozado, y pienso en la tristeza y la soledad de ese personaje, la ausencia absoluta de contacto con la realidad, la frialdad con la que mata mientras es dolorosamente vulnerable y frágil y consigue despertar en el espectador, en mí, una mezcla incomprensible de amor y horror y fascinación y lástima. Está solo y está jodido para siempre y no puede ser más que lo que es, le guste o no, y solo cuenta, como decía Blanche Devereaux, con la amabilidad de los extraños.

21 diciembre 2010

Más agradables sorpresas (de casta le viene al galgo)

Ya sé que he sido y estoy siendo muy pesada con Boardwalk Empire. Hoy leyendo una reseña (aquí) me he enterado de otra cosa que tenía que compartir.



Este magnífico personaje está interpretado por un actor llamado Jack Huston.

Sí, sí. Nieto de John Huston.

18 diciembre 2010

Tiempo perdido y resaca

Dos noches seguidas de cena más copas más trasnoche más pocas horas de sueño hacen que tenga una sensación rara de irrealidad. Como si no estuviera en el lugar correcto o mi cuerpo no fuera mío al mismo tiempo que es demasiado mío.

El hecho de llevar una hora y pico en un ciber mientras espero que llegue la hora de coger un tren no ayuda nada.

En general, lo único que puedo decir es que no tengo nada que decir. Pero quisiera decir algo.

Así que voy a poner una canción de Bruce.



Tengo sueño.

17 diciembre 2010

Lucidez

Soy la persona que quiero ser. Y no me doy cuenta.

12 diciembre 2010

Lo que yo pienso de "la crisis de los controladores"

Lo explican muy bien Mel y Mauro Entrialgo.





11 diciembre 2010

Llorar

Siempre hay motivos, pero últimamente los míos no logran conmoverme. Sin embargo, no puedo evitarlo cuando veo cosas como esta.

Lo podríamos titular Desesperación



O como esta, que voy a llamar Esperanza

Media vuelta from Umbilical Produccions on Vimeo.

09 diciembre 2010

Qué mundo podrido

Cuando una persona ignorante e idealista piensa en una profesión llamada "periodismo", imagina intrépidos reporteros en busca de la verdad. El protagonista de los sueños de esa persona ignorante e idealista quiere saber las verdades, desenmascarar a los inicuos y hacer que triunfe el bien. O, por lo menos, si ha de triunfar el mal, que alguien lo sepa.

Pero los periodistas, en realidad, copian teletipos sin leerlos y se van a casa a ver el fútbol, como todo el mundo.

Esta semana hemos tenido dos noticias que nos han conmocionado, si es que algo puede hacerlo. Una ha sido la huelga de controladores aéreos. En ella hemos asistido a la indignación de muchos que no han podido irse de vacaciones y de unos pocos que no se pueden creer que todos los demás se conformen con solo media cara de la situación.

La otra, por supuesto, está siendo Wikileaks.



Es asombroso ver cómo el trabajo de un periodista, hoy en día, es tan parecido al de un reproductor de mp3 o una fotocopiadora. Y para una vez que algo pasa, que de algún modo tenemos acceso a algo de lo que normalmente está oculto, para una vez que podemos hacernos realmente conscientes de todo lo que de verdad ocurre mientras nosotros vemos el fútbol, los medios de comunicación solo funcionan como altavoz. Lo demás no va con ellos.

Hubo un tiempo en que al periodismo se lo llamó "cuarto poder". Pero hace mucho tiempo que el "primer poder" se lo comió con patatas. Lo digo, no sé, por si alguien no se había dado cuenta.

Yo no puedo hacer nada de nada. Pero en cuanto me dejen (porque ahora no me dejan) voy a cerrar mi cuenta de Paypal.

03 diciembre 2010

Pero cómo me aburro

Si de verdad, de verdad, se pudiera elegir, yo no le haría ascos a algo como esto:



Incluso con, como dice Daeddalus, esa camisa abierta hasta más allá de los límites de la decencia...



Y sí, me doy cuenta de que la edad de mi hombre ideal sube y sube. Con la mía, lo cual interpreto como un síntoma de salud mental.

Este vídeo pertenece a Closer, una película del año 2004, ya ha llovido. Pero me parece un buen ejemplo de cómo sabe mirar. Y su voz.



- Él es muy bonito.
- Ella es muy ... alta.
- Así que... eres stripper.
- Sí... ¿Y...?
- ...
- Cuídate.
- Lo haré. Tú también.

02 diciembre 2010

Siempre, todos los días, salgo de casa pensando que hoy va a pasar algo.

Y nunca pasa nada.

01 diciembre 2010

The dream is back

La otra noche, cuando la pesadilla estaba más bien en la vigilia, volví a soñar con tus calles mientras dormía.

Una de las primeras

Los sonoros nombres resonaban en mi cabeza, Lexington, Madison, Broadway.

From Queens

El ruido de las calles, los altos edificios, el cielo lejano, las posibilidades, el absoluto anonimato.

Primera vista del Chrysler

Y me desperté queriendo volver, sintiendo dentro de mí algunas canciones, pensando en un largo vuelo.

Grand Central Terminal

Supongo que lo único que quiero es sentir el pulso del centro del universo en el medio de mis latidos.

Desde Brooklyn Bridge

Otra vez.