10 septiembre 2008

Silencio

Uno de los elementos que le dan más peso a mi bolso es un bloc en el que suelo apuntar cosas. Esas frases que apunto a veces me sirven para después trasladarlas aquí y otras veces se quedan solo como recuerdo, anotaciones sueltas sin importancia.

En todo este verano no he apuntado en el bloc ni una sola palabra. No tengo nada que contar.

De todos modos, el bloc no lo suelto. Por si acaso. No vayamos a perder la esperanza.

5 comentarios:

Anónimo dijo...

¿Me has oído teclear o qué?

Gata Vagabunda dijo...

Ten cuidado, K. Dicen que cuando uno deja de escribir en el blog es que roza la felicidad con los dedos... ;-)

NoSurrender dijo...

mmm... no estoy de acuerdo con la Gata. Puede ser compatible, aunque se escribe peor cuando muere el ansia, sin duda :)

Besos!

Anónimo dijo...

Qué me vas a contar...

Antígona dijo...

He aquí mi teoría, de todo punto refutable: cuando uno escribe mucho para sí mismo, es que no tiene a nadie a quien contarle lo que más le importa. Ahora le das la vuelta. Ergo...

La teoría tiene sus matices, no obstante. Y por supuesto, sus excepciones.

O sea, que dicho esto, menuda teoría de pacotilla.

No me hagas caso, que ando hoy un poco volada :)

¡Un beso grande!