13 marzo 2010

Giving up

El otro día, respondiendo racionalmente al ataque de mis amigos, que me llamaban friki por ser fan de Lost, les contesté (creo que ya lo he dicho) que eran ellos y no yo los que estaban fuera del mundo por no haber visto la serie y no haber participado del fenómeno. Que el mundo había cambiado en una parte (si quieres) humilde, y que ellos simplemente se lo habían perdido. Yo estoy segura de que eso es cierto, y por eso, después de decirlo, vi la duda en sus ojos. Vi pasar por sus mentes la idea de que tal vez era cierto. Tal vez se han quedado fuera. Ellos se ríen de mí, pero yo soy quien ha visto Lost, yo soy quien conoce la importancia del número 23. Fingen que no les importa, pero yo sé que les jode.

Pero claro. Este tipo de razonamiento se puede aplicar a todos los objetos que significan en cualquier medida una revolución. Esa misma noche (tal vez la siguiente), pensando no sé por qué en el enésimo link que no pude pinchar por no ser del club, me di cuenta de que, por otra parte, era yo la que no estaba en el mundo. En ese otro mundo que ha sufrido un cambio en los niveles generales de comunicación entre usuarios. Me di cuenta de que estaba enrocada, maniáticamente, en ese absurdo lugar entre el alfil de la cerrazón y la torre de la exclusividad. Me recordé a mí misma a esos cabezotas que tardaron 5 años en comprarse un móvil.

No quiero quedarme sola en el desierto.

Total: que me he rendido.

Ya estoy en Facebook.

7 comentarios:

Fanshawe dijo...

Ja!!!!

La gata aún no está, ni estará :P

Te agrego, jijiji.

Gata Vagabunda dijo...

Te ha faltado tiempo para hablar, deslenguado! :P

Pues ni estoy en Facebook ni sé nada de Lost, me temo que soy prehistoria. Jolines.

k dijo...

Una de las cosas que más me joden en esta vida es ser esclava de mis palabras (un día tengo que hacer un post con el título "las cosas que más me joden en esta vida"; será de los interminables).

Así que bueno. En fin. Ya está hecho. No hay vuelta atrás.

Gata... no te pierdes nada! :D

PSYCOMORO dijo...

Pues yo me resisto a los embrujos de Facebook, pero me puedes apuntar a tu lista inconfesable de freaks que comparten la lógica de abrasa las entrañas de Lost.

k dijo...

Ahora que estoy dentro, Psycomoro, te puedo decir una cosa que es la primera impresión que me llevo: Facebook no hace falta. Pero bueno, ya que está, se usará (probablemente). De aquí a un post cantando las alabanzas... aún queda mucho (no digo, ya no, que sea imposible).

NoSurrender dijo...

Facebook parte de la insólita idea de que todos tenemos un perfil único que compartimos con todos. Que somos la misma persona cuando estamos con los amigos, con la familia o en el trabajo. Increíblemente, millones y millones de seres humanos hemos creado una página allí.

Como decía Obelix, estos romanos estan (estamos) locos

k dijo...

Yo creo que la idea clave ha sido el hecho de poder cotillear. Somos asín. Los vecinos de la irreductible aldea gala se habrían apuntado en masa, para asombro de Astérix :)