25 marzo 2008

No mucho

El último día, cuando en el tren que me llevaba a través de Nueva Jersey hasta el aeropuerto un señor negro, trajeado, enorme y con un saxofón se sentó a mi lado y me sonrió, sin saber por qué pensé en esta canción, con el ruido de trueno de las ruedas sobre las vías de fondo. Perfectamente podría ser la banda sonora para este viaje.

Esta visita a Nueva York ha sido para mí todo lo que esperaba de ella, incluso más. Estoy acostumbrada, como todo el mundo, supongo, a que lo que espero no sea lo que obtengo.

No ha sido así con Nueva York. No puedo escribir mucho ahora. Lo he intentado y no me gusta el tono. Esta tarde, viendo fotos, he vuelto a pensar en esta canción. La he buscado, la he escuchado otra vez. Ella sí tiene el tono.

Por ahora, si os apetece, aquí la dejo. Espero añadir algo próximamente.



TIERRA DE ESPERANZA Y SUEÑOS

Coge tu billete y tu maleta
el trueno rueda por las vias
No sabes a donde estás yendo
pero sabes que no volverás
Cariño, si estas cansada
apoya tu cabeza sobre mi pecho
Cogeremos lo que podamos llevar
y dejaremos el resto
Grandes ruedas rodando a través de campos
donde fluye la luz del sol
Reúnete conmigo en una tierra de esperanza y sueños

Yo proveeré para tí
y estaré a tu lado
Necesitaras un buen compañero
para esta parte del viaje

Deja atrás tus tristezas
Deja que este día sea el último
Mañana saldrá la luz del sol
y toda esta oscuridad habrá pasado
Grandes ruedas rodando a través de campos
donde fluye la luz del sol
Reúnete conmigo en una tierra de esperanza y sueños

Este tren
lleva santos y pecadores
Este tren
lleva perdedores y ganadores
Este tren
lleva putas y jugadores
Este tren
lleva almas perdidas
Este tren
los sueños no se frustarán
Este tren
la fe será recompensada
Este tren
escucha las ruedas de acero cantando
Este tren
Las campanas de la libertad sonando

Este tren
lleva santos y pecadores
Este tren
lleva perdedores y ganadores
Este tren
lleva putas y jugadores
Este tren
lleva almas perdidas
Este tren
lleva corazones rotos
Este tren
ladrones y dulces almas de los difuntos
Este tren
lleva locos y reyes
Este tren
todos a bordo
Este tren
los sueños no se frustrarán
Este tren
la fe será recompensada
Este tren
escucha las ruedas de acero cantando
Este tren
Las campanas de la libertad sonando

5 comentarios:

Anónimo dijo...

Llevo toda la sema esperándote para que nos lo cuentes todo. Luego me doy cuenta de que no, de que quiero que me lo cuentes todo a mí, no a los demás, en plan egoísta. Y finalmente caigo en la cuenta de que lo que quiero es verlo y sentirlo, no que me lo cuentes. Quiero ver tu cara mirando las fotos o que se te escape una sonrisa mirando "Misterioso asesinato en Manhattan".

Que envidia, joe.

Antígona dijo...

La canción es genial, K, la letra realmente conmovedora, la estaba leyendo mientras la escuchaba y notaba cómo poco a poco se me iban poniendo los pelos de punta.

Pero tendrás que contarnos más para que sepamos por qué es esta canción la que sirve de banda sonora de tu viaje. Al menos yo no puedo saberlo aún a ciencia cierta, más allá de las cosas que intuya o deje de intuir.

Lo que no se me escapa es que ha sido un viaje fantástico. Y me alegro por ti. Es difícil que Nueva York defraude. Menos con esos señores cargados con enormes saxofones que sonríen cuando se sientan a tu lado :)

¡Un beso!

NoSurrender dijo...

Vaya, creí que nos ibas a contar que era el mismísimo Clarence Clemons, aunque no creo que él coja muchos trenes, salvo éste de “hope and dreams”. Tus fans esperamos un buen relato de tus andanzas neoyorquinas, eh.

Dame envidia!!

k dijo...

No os creáis, me parece que para mis amigos es un coñazo total que no hable de otra cosa. Llego y están todos metidos en el follón de las venideras oposiciones (otra vez, ¿podré soportarlo?) En fin, menos mal que los tengo a ellos para que me sujeten a la realidad.

Fansh, cuando queráis podéis venir a ver las fotos, ya lo sabes. Si no, ya iré yo a enseñároslas.

Antígona, te vas a arrepentir de haberme pedido que cuente, ya lo verás :) Y es una canción alucinante, me alegro mucho de que te guste. Cuando las pongo siempre pienso que nadie las escucha... el lector al que le gusta Bruce ya las conoce; el lector al que no, piensa "ya está otra vez dando el coñazo con Bruce". Así que, si hay una sola persona que se detiene a escuchar en este mundo acelerado y estresado, es un alegrón. Si eres tú, más.

Lagarto, era una versión joven del Big Man, claro que sí. Estuve a punto de decírselo, pero mi inglés es demasiado imbécil. Dámela tú a mí con Berlín :)

Anónimo dijo...

Coge el tren de la noche, cógelo, cógelo. (Billywild)