05 febrero 2007

The crying game

Te quiero, pero no te puedo querer. Quiero que te alejes, pero necesito que estés cerca. No me puedes tener, pero no puedo vivir sin ti.

La historia de un amor imposible que no se puede rechazar ni tampoco aceptar. La historia de cómo llegué a este callejón sin salida.

Los pasos que va dando Fergus le abocan a un final sin elecciones posibles. El destino que le impone su carácter. I can't help it. It's my nature.

El año que se estrenó fue un bombazo. Leo por ahí que fue una de las veinte películas más taquilleras en Estados Unidos aquel año (1992). No es raro si se tiene en cuenta lo mucho que gusta allí la idea de "terrorista romántico". Pero sí es raro si pensamos en "lo otro". Es decir, en el personaje de Dil, interpretado por Jaye Davidson.

La he vuelto a ver después de todos estos años. No ha envejecido tan mal como me temía, no me ha gustado tanto como aquella vez. Crecemos y perdemos la inocencia. Es nuestra naturaleza.

Se la puse a los chicos porque el otro día tuve una conversación con alguien sobre el tema de la homosexualidad. Mi opinión sobre ese tema quedó en su momento marcada por esta película. Hubo un antes y un después de Juego de lágrimas en mi concepción del amor; y también de la amistad.

De aquel tiempo (hace doce o trece años y yo andaba por los veinte, la edad que ellos tienen ahora) y de aquella película tengo el recuerdo de haber podido separar (por fin) el amor del sexo en mi cabeza. Creo que fue una liberación y lo agradezco. Y por eso quise que la vieran: porque necesitan abrir sus miradas. Llevarlas un poco más lejos.

A mí me gusta mucho esa costumbre que ahora se está perdiendo de abrir las películas con un plano general tirando a neutro, de ubicación, de ésos que si te los pierdes no pasa nada, con los títulos de crédito sobreimpresionados y una música que ya te va diciendo si lo que estás a punto de ver te gustará o no.

The crying game empieza con uno de esos planos. Un travellling circular sobre una feria de pueblo con When a man loves a woman sonando de fondo. De pronto, la canción deja de ser parte de una depurada banda sonora que flota en el sistema dolby, no sabemos muy bien cómo, y empieza a salir de uno de los altavoces portátiles de la feria: ya estamos en la ficción.

No es que tenga siempre mucho mérito el asunto, pero ese Oscar al mejor guión original estuvo aquel año bien concedido. El guión es bastante redondo. Lleno de alusiones internas, de paralelismos y metáforas. No podía ganar el de mejor película el año de Sin Perdón.

El personaje principal, Fergus, interpretado por Stephen Rea, es ese tipo de papeles por los que casi cualquier actor daría algo bueno. Rea lo hace suyo. Por desgracia, no he visto más películas suyas, así que no sé cuánto de distinto, de especial para este personaje hay en su interpretación. En cualquier caso, nació para interpretar este papel. O el papel nació para ser interpretado por él. Conmueve su fragilidad. Contagia su humanidad. Compartes con él el dolor por el desgarro de su corazón. Te contagia el dolor por no poder amar lo que desea. O por no poder desear lo que ama. Aquí yo no le habría dado el Oscar a Pacino. Tampoco se lo habría dado a él aunque no hubiese habido Stephen Rea. (¿Se nota que me he documentado?)

En la primera parte de la película (porque tiene dos muy claramente marcadas), Forrest Whitacker está tremendo. Consigue que el espectador mezcle en sus sentimientos el patetismo con la compasión, el asco con la ternura, sin casi poder distinguirlos. Compone en pocas secuencias (de las cuales pasa buena parte con la cara tapada por un saco) un ser humano completo, comprensible, débil y fuerte, entero en su miedo, resignado a morir y sin embargo anhelante de vida.

Juego de lágrimas habla de cómo puede uno establecer una conexión especial con alguien a quien acabas de conocer y de cómo esta conexión puede marcar tu vida para siempre. Habla de lo que pueden hacer las apariencias con nosotros. Habla de que no decides de quién te enamoras, aunque lo intentes.

Se pueden sacar muchas conclusiones de esta película, se pueden hacer muchas reflexiones. Una de ellas: no puedes saber a qué esquina de la vida te conducirán tus pasos, ni tampoco qué harás cuando llegues allí.

11 comentarios:

Anónimo dijo...

La verdad es que no sé ni qué decirte porque, en verdad he de confesar, que no he podido ni leerme el ladrillo éste que has puesto.

No tengo ni idea de la peli de la que nos ilustras, así que ni idea de qué decirte.

Pero bueno, como dijo alguien alguna vez: "algo es algo" y "no importa lo que digas, sino que digas algo"...

Saludos desde el continente negro.

PD. Uno apidito que no tengo mucho tiempo hoy.... ("Esta frase en otro contexto podría dar mucho juego...")


Se levanta el telón y se ve un tío en un urinario público. Se baja el telón.

Se levanta el telón, 10 minutos más tarde, y se ve el mismo tío en el mismo urinario público. Se baja el telón.

Se levanta el telón, 10 minutos más tarde, y se ve el mismo tío en el mismo urinario público. Se baja el telón.

¿Cómo se llama la peli?....



"Micción imposible"

desconvencida dijo...

Sólo la he visto una vez, algún año después de su estreno, por tv, pero siempre la he tenido pendiente de revisionar porque como tú dices supongo que mi perspectiva de la película, en estos diez años que han pasado sin verla habrá cambiado bastante, igual que yo lo he hecho...

En cuanto a Stephen Rea es un actorazo, no se prodiga mucho (o si lo hace, pero en películas irlandesas e inglesas que no se comercializan por aquí), pero le puedes ver en muchas de las otras películas de Neil Jordan, es su actor fetiche, como "Michael Collins", "Desayuno en Plutón" (esta no la he visto, se me escapó de la cartelera), "El fin del romance" y alguna otra...

Gata Vagabunda dijo...

... ah, "El fin del romance", qué buena, cómo me gusta Graham Greene en el cine...

Gata Vagabunda dijo...

Respecto a lo de separar sexo/amor, me ha recordado a las últimas conversaciones en "Reducir al mínimo", ese lugar donde su dueño dice que el pone un post y luego la gente comenta sobre lo que le da la gana, jejeje (como aquí)

Anónimo dijo...

Ya me estoy bajando El fin del romance, porque he oído esas cosas que decís :)

Yo también me acordé de esa conversación, gata. Uno olvida dónde ha aprendido las cosas que sabe o dónde ha adquirido las cosas que siente. Y bueno, un día pones una peli antigua y dices, "mira, de ahí salió".

Con respecto a los comentarios, que suceda eso me parece genial. La gente habla sobre lo que le hace sentir lo que escribes. Lo que escribe ese juntaletras estupendo hace sentir muchas cosas a mucha gente.

desconvencida dijo...

"El fin del romance"... bueno, es un dramón total, que cuenta una historia aparentemente inverosímil basada en hechos reales... tengo semiacabado un post sobre la película y la novela de Greene, a ver si lo cuelgo un día de estos...

NoSurrender dijo...

Stepehn Rea es un buen actor en las dos películas en que le he visto (the butcher y crying game). Como todos los actores irlandeses, que tienen una manera de interpretar muy literaria y sincera. Y como Neil Jordan, que creo que es uno de los tipos más lúcidos que hay en el negocio del cine hoy en día.

Cuando vi esta película me centré mucho más en la relación entre terrorista y secuestrado. Y como ésta entra en su conciencia, algo para lo que este hombre no está preparado y le domina completamente. No creí cuando vi la película que hubiera tanto una historia de amor y/o sexo posterior como una necesidad de mutar un alma por otra. Tendré que verla otra vez, después de leerte. ¡Vaya post!

Anónimo dijo...

Yo creo que mi hermana me la contó una vez... no estoy segura. A ver si no tarda mucho en bajar, que tengo muchas ganas de verla. Dramones. Estupendo (de vez en cuando).

Lagarto, es mucho más fácil "entrar" en la parte de la relación del terrorista y el secuestrado que en la parte en que Fergus se enamora de Dil. Pero es esta segunda parte la que le da personalidad, peso y carácter a la película; la que hace de ella algo especial. Estoy de acuerdo contigo en ese tema que mencionas: de alguna forma Fergus quiere apropiarse del alma de Jody, suplantarle de algún modo, heredarle, pero sólo en parte. Jody va a estar presente en los pensamientos y los sentmientos de Fergus también como alter ego y como oponente, ¿no?

Lo de "Vaya post"... lo dices por lo largo, no? Y porque me obligué a parar! Qué verborrea! Diarrea de palabras es lo que tengo, carajo...

Anónimo dijo...

Se me ha escapado esta película. Me la apunto. Gracias.

Anónimo dijo...

Hoy tengo que darte las gracias por traerme el recuerdo de esta película. Algunas veces olvidamos lo que hemos visto, ahora tengo una mezcolanza curiosa porque el argumento de la película se ha ido diluyendo en mi memoria (gracias a ti he recordado gran parte), pero sin embargo guardaba intacto el sentimiento que me produjo, ese "rascarte" por dentro.

Anónimo dijo...

billywild, no dejes de verla. Creo que merece la pena. Y, si no te gusta, siempre podemos hacer un debate o algo.

Ladydark, las gracias te las doy yo a ti por decirme eso. Conozco esa sensación de sentimiento recuperado y me hace tremenda ilusión haber colaborado al tuyo :)